Lisha tiene hasta el viernes para cumplir con los requisitos de Familia.

Lisha tiene hasta el viernes para cumplir con los requisitos de Familia.

San Juan, Puerto Rico – La popular influencer Lisha se enfrentará a una decisiva audiencia este viernes, con el objetivo de demostrar si ha cumplido con los requerimientos impuestos por el Departamento de la Familia de Puerto Rico para obtener la custodia compartida de su hija, Nazaret.

La artista de las redes sociales ha sido objeto de intensos debates en el último mes, luego de que una obra de arte “evolutiva” revelara una imagen de ella separada de su hija, un escenario que provocó una reacción mixta entre los seguidores de Lisha.

Los estatutos del Departamento de la Familia que Lisha debe cumplir para tener la posibilidad de una custodia compartida incluyen: prueba de dopaje, demostración de ingreso estable y exámenes psicológicos. Hasta ahora, no se ha confirmado si Lisha ha cumplido con estos requisitos.

Este próximo viernes, la influencer tendrá la oportunidad de demostrar ante el tribunal que ha cumplido con los estatutos y que está en condiciones de cuidar y mantener a Nazaret.

La noticia ha generado una gran expectación entre los seguidores de Lisha y el público en general, que ha seguido atentamente el desarrollo de esta historia y espera ansiosamente el resultado de la audiencia de este viernes.

El Departamento de la Familia de Puerto Rico establece una serie de requisitos para evaluar la aptitud de los padres en casos de custodia compartida. La capacidad económica para sostener y proveer a los hijos es uno de los factores principales que se toman en cuenta. Los padres deben demostrar ingresos estables, ya sea a través de un empleo o cualquier otro medio lícito. La intención es garantizar que puedan proporcionar un entorno adecuado y seguro para el menor, y que sean capaces de satisfacer sus necesidades básicas, incluyendo alimentación, educación, salud y vivienda.

La prueba de dopaje es otro de los requerimientos que el Departamento de la Familia impone. El objetivo es confirmar que los padres están libres de drogas y cualquier otra sustancia que pueda afectar su capacidad para cuidar y proteger a sus hijos. La seguridad y el bienestar del menor son siempre la principal preocupación, y la presencia de drogas puede poner en riesgo el entorno en el que se desarrollará el niño.

Además, los exámenes psicológicos también son una parte importante del proceso. Estos exámenes evalúan la salud mental de los padres y buscan identificar cualquier problema o trastorno que pueda interferir con su capacidad para ser buenos progenitores. Los profesionales de la salud mental son responsables de realizar estos exámenes y proporcionar al Departamento de la Familia un informe detallado de su evaluación.

Todos estos requisitos tienen la finalidad de garantizar que los padres que solicitan la custodia compartida de sus hijos sean capaces de proporcionar un entorno seguro, saludable y amoroso para el desarrollo de los menores. En el caso de Lisha, la audiencia del viernes determinará si ha cumplido con estos requisitos y si está en condiciones de compartir la custodia de su hija Nazaret.